Desde mis inicios en el marketing he tenido que lidiar con la creación de contenido de valor. Era el año 2000, y mucho del contenido creado para la cadena de hoteles ecológicos donde laboraba tenía mucho de intuición, otro tanto de la visión de sus directores, y otro poco de las expectativas de sus viajeros. Tenía en ese entonces la idea equivocada que sólo un producto con una clara diferenciación podía darse el lujo de producir contenido sofisticado.
Sin embargo, la llegada de Google y posteriormente de su herramienta Analytics empezaron a darnos pistas de la calidad del contenido que producíamos de cara a los usuarios. Empezó a hacerse común el término SEO, acrónimo en inglés de Search Engine Optimization, u Optimización en Motores de Búsqueda en su versión traducida.
¿QUÉ ES EL SEO?
El SEO es el proceso para obtener tráfico de manera orgánica o gratuita a través de los motores de búsqueda. Una adecuada optimización de tu sitio web implica hacer uso correcto de palabras claves, enlaces, imágenes y vídeos. Sin embargo, el Marketing de Contenidos es lo que ayuda realmente a darle autoridad y confiabilidad a tu sitio y a mejorar tu SEO.
LA IMPORTANCIA DEL SEO EN EL MARKETING DE CONTENIDOS
Entiéndase que el SEO y el Marketing de Contenidos van de la mano. El SEO requiere de buen contenido, y el Marketing de Contenidos es el que logra ese objetivo.
El SEO permite identificar las palabras claves con mayor demanda para una determinada audiencia, estas son el insumo para una estrategia de contenidos relevante. Las palabras claves deben ser consideradas en el contenido elaborado para la web, sean posts, URLs o imágenes o vídeos.
Cabe notar que el actual algoritmo de Google prioriza contenido que denote expertise, autoridad y confiabilidad.
- Expertise: ¿Quién escribe (marca o blogger) es experto respecto a lo que ofrece, vende o comunica? ¿Se comunica claramente el propósito del sitio web?
- Autoridad: ¿Qué tan interesante es el contenido para mi audiencia? ¿Tiene fuentes confiables o enlaces a sitios relevantes? ¿Nos refieren otras webs de buena reputación? ¿Ofrezco contenido de calidad en texto, imágenes y vídeos?
- Confiabilidad: ¿Qué tan veraz es nuestro contenido? ¿Tenemos personas reputadas escribiendo o participando en mi web o blog? ¿Ofrezco contenido útil y actualizado, o sólo busco vender?
Demos por sentado que su marca o blog no tienen problemas de expertise y confiabilidad. Aquí lo fundamental será demostrar autoridad y trabajar permanentemente en mantenerla en un alto nivel, y para ello el SEO y Marketing de Contenidos son claves.
¿POR DÓNDE EMPEZAR?
Luego de lo anteriormente descrito, Google debe convertirse en su lugar favorito. ¿Pero como ser relevante allí?
Hay dos maneras de lograrlo:
- Publique en un sitio con alta autoridad donde el contenido tendrá una buena clasificación.
- Desarrolle la autoridad de su propio sitio y de su contenido publicado.
La primera opción es la más rápida, sin embargo requerirá de sus buenos oficios de experto para ganar un espacio en algún blog o sitio web de alto tráfico dirigido a la audiencia que le interesa. Si logra ganar el espacio, debe procurar seguir las reglas SEO generales, y coordinar los keywords claves con el sitio donde publicará su post.
La desventaja de esta alternativa es la pérdida de control en el proceso SEO, así como en la generación de listas de distribución y analítica de tráfico. Asimismo, si se trata de una marca, el manejo del branding tendría ciertas restricciones, salvo sea un contenido patrocinado.
La segunda opción del propio sitio le da más control en sus contenidos para hacer acciones de re-marketing, contenidos de mayor calidad para redes sociales, crear listas de contactos (leads) para email marketing, y construir una estrategia de reputación digital que le otorgue autoridad y posicionamiento orgánico a su marca (personal o corporativa).
PIENSE EN EL LONG TAIL AL MOMENTO DE HACER SEO
Nuestros productos o servicios ya no se dirigen exclusivamente a segmentos de mercado amplios, es decir, al gran público, y por ende a la gran competencia. Como diría Seth Godin, el nuevo marketing no se trata de productos estándar para personas estándar, estamos en un entorno de mercados nichos, numerosas pequeñas audiencias con intereses particulares.
Tomando la teoría del long tail de Chris Anderson, existen múltiples mercados nichos, en donde con un adecuado contenido y SEO podemos posicionar nuestros productos o servicios, sin entrar en competencia con palabras claves que la gran mayoría utilizaría.
Ahora, no se piense que lo anterior aplica solo para pequeños emprendedores o empresas PYME, para nada. Amazon es un ejemplo. Las búsqueda de “Zapatillas para Correr” o “Zapatillas de Running” está mucho mejor posicionado orgánicamente que la palabra “Zapatillas”, ¿por qué?, pues la gente busca soluciones concretas.
En ese sentido, trate de hacer el ejercicio de definición de palabras claves para cada uno de sus productos y servicios, y procure considerarlos en su estrategia de contenidos.
Un error muy común es aplicar las palabras claves especificas o del tipo long tail sólo para estrategias SEM (Search Engine Marketing), es decir anuncios pagados en Google. Sin embargo, estos anuncios por si mismos no contienen contenidos que denoten autoridad. El SEM puede ayudar al SEO, pero no lo reemplaza.
Recuerde, el Marketing de Contenidos no elimina la necesidad de hacer SEO, más bien lo potencia y enriquece. Ambos aplicados de manera conjunta construirán el anhelado posicionamiento de marca deseado.